sábado, 30 de abril de 2016

Un domingo con sabor a chocolate

Dentro de la franja ‘Libros para comer’, se cierra este espacio con la charla sobre chocolatería colombiana.



Al mediodía, en la Carpa VIP de Corferias, el chef y pastelero Hobany Velasco dará al público una charla sobre chocolate, dentro de la franja de ‘Libros para comer’, en compañía del escritor y periodista Enrique Patiño, y de la productora de cacao de Boyacá Rosa Padilla, líder de la empresa de chocolates finos de aroma ‘Color Chocolate’.

La charla girará en torno a la relación estrecha entre literatura y chocolate, pero también acerca de la manera en que este fruto tropical ha influido en nuestra cultura y en cómo Colombia se está convirtiendo en uno de los países capaces de producir chocolates finos de aroma de alta calidad, de una de las mejores variedades en el mundo. Velasco ha publicado obras sobre el tema.

La Premio Nobel de la Paz Jody Williams estará en la FILBo 2016

·         La Nobel vendrá a presentar su libro ‘La hippie que llegó a ser Nobel de la Paz’ y a hablar de perdón, reconciliación y conflicto. Conozca las cinco frases que mejor la definen.



Desde que ganó el Nobel de Paz en 1997, Jody Williams viaja por el mundo con la claridad de que solo la justicia puede dejar atrás los conflictos.

Esta mujer que habla con desfachatez, se considera una hippie, vive en el casi desconocido pueblo de Putney de tan solo 2.000 habitantes en el estado de Vermont (Estados Unidos) y suelta palabras soeces a destajo para expresar sus ideas, declaró en Guatemala, por ejemplo, hace dos semanas, que “la justicia nunca es un acto de venganza. Debe ser aplicada para que no se repitan las barbaries que se han cometido”.

Su posición a favor de la rectitud de la justicia y en contra de las minas antipersonales definen bien a esta mujer que lanzó en 1992 la Campaña Internacional para la Prohibición de las Minas Antipersona, en coordinación con seis ONG, una iniciativa que cobró una fuerza extraordinaria y terminó integrando a 1.300 organizaciones de 95 países hasta el punto de conseguir que en 1997 se firmara el Tratado de Ottawa, que prohíbe desde entonces el uso de las minas antipersonales. Colombia es el segundo país más afectado en el mundo por el tema, aún hoy, después de Afganistán.

Así ganó el Nobel ese mismo año y con todo su legado pacifista llega ahora a la FILBo 2016, en una visita más que oportuna, sobre todo en momentos en que las discusiones sobre el desminado forman parte de las negociaciones con la guerrilla, y los diálogos de paz con las Farc vislumbran la firma de un acuerdo definitivo.

Además, Jody Williams visita Colombia justo en el año en que el tema de la Paz será crucial durante las Conversaciones que le cambiarán la vida, que en este 2016 tendrá como nombre Fin


y principio: a propósito de la paz, título que nace a partir del poema de la Nobel polaca Wislawa Szymborska.

Jody Williams, precisamente, es una de las invitadas centrales de la FILBo, que este año irá del 19 de abril al 2 de mayo en Corferias. Su activismo, de hecho, comenzó durante la guerra de Vietnam y siguió en América Central durante los años ochenta, cuando se centró en hablar sobre los efectos de la política de Estados Unidos en la región y aprendió español fluidamente en Nicaragua.

En 2007 lideró una misión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU para investigar los crímenes de guerra en Darfur. Luego, al frente de la organización Nobel Women's Initiative, de la que forma parte junto a otras ganadoras del premio de la Paz como Rigoberta Menchu, Wangari Maathai, Betty Williams, Mairead Maguir y Shirin Ebadi, ha venido trabajando para darles reconocimiento a las mujeres que luchan por cambiar el mundo en ámbitos como la justicia, la igualdad y la paz.

Actualmente sigue siendo parte de la Campaña Internacional para la Prohibición de las Minas (International Campaign to Ban Landmines) y es la décima mujer y tercera estadounidense en recibirlo en los casi cien años de historia del Premio Nobel. Además, es escritora y muy prolífica. Sus obras son numerosas, pero su libro más reciente que además estará en la Feria, es La hippie que llegó a ser Nobel de la Paz. A sus 65 años, llega a Colombia a hablar de paz y a sentar sus puntos de vista al respecto.

Cinco frases de Jody Williams

ü  “Está comprobado que los pueblos que no hacen justicia ni reconocen la memoria histórica, no sanan sus heridas. La gente que cree que simplemente se puede olvidar lo sucedido está equivocada porque esta es la mejor forma de seguir desunidos. Sobre todo en los crímenes: no se pueden dejar en el olvido y ya, sino que hay que reconocerlos y pagar el precio que cada sociedad defina qué es lo justo”.
ü  “Pienso que hay una mitología de que si quieres cambiar el mundo tienes que ser santo, como la Madre Teresa o Nelson Mandela o el arzobispo Desmond Tutu. La gente ordinaria con vidas que suben y bajan y dan vueltas en círculos pueden igual contribuir el cambio”.
ü   “Incluso los soldados de la Guerra de Vietnam han dicho que cuando peleaban en esa guerra, las minas eran una de muchas armas que usaban en la lucha. No fue sino hasta comenzaron a pensar sobre el legado que habían dejado las minas que reconocieron el impacto a largo plazo e indiscriminado de esta arma”.

ü  “Para mí, la diferencia entre una persona extraordinaria y una ordinaria no es el título que tenga, sino lo que hacen para convertir el mundo en un lugar mejor para todos nosotros”.
ü  “Creo que preocuparse por los problemas que plagan nuestro planeta sin tomar pasos para enfrentarlos es absolutamente irrelevante. Lo único que cambia el mundo es tomar acciones”.


Rueda de negocios de FilBo dejó expectativas de negocio por US$9,5 millones

Esta edición superó en expectativas de negocio en US$8,2 millones a la edición anterior.

·       Entre los compradores se encuentran delegados de Aruba, Bolivia, Chile, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, España, Estados Unidos, Guatemala, México, Panamá, Perú, Puerto Rico y República Dominicana.



Como producto de las citas de negocios realizadas entre 67 compradores internacionales y 98 exportadores colombianos en la rueda de negocios de la XXIX Feria Internacional del Libro de Bogotá (FILBo), la industria editorial del país exportará US$9.5 millones a 15 países de América Latina, Europa y Norteamérica.

Entre los compradores se encuentran delegados de Aruba, Bolivia, Chile, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, España, Estados Unidos, Guatemala, México, Panamá, Perú, Puerto Rico y República Dominicana; interesados, especialmente, por los textos escolares y universitarios, así como por el material didáctico.

Esta edición superó en expectativas de negocio en US$8,2 millones a la edición anterior, en la cual se realizaron 1,3 millones de dólares. El incremento está relacionado con la ausencia de aranceles en Centroamérica, Chile, Perú y México que experimenta la industria editorial para este año.

“El valor agregado que encontraron los compradores internacionales en la oferta del sector editorial de esta rueda de negocios fueron los libros interactivos, que además del papel se complementan con plataformas virtuales que desarrollan de manera más profunda el libro. También se destacaron los textos a la vanguardia en temas especiales como ingeniería y software”, aseguró María Claudia Lacouture, presidenta de ProColombia.

Por su parte, Cecilia Rendón, coordinadora de compras del Grupo Rodrigo Porrúa de México, afirmó que “estamos en busca de nuevos talentos y nuevas caras. Colombia es un gran semillero de arte y de cultura, y hay grandes autores de poesía, manuales de negocios y novelas”.

La Feria Internacional del Libro de Bogotá se extenderá hasta el próximo 2 de mayo en el recinto ferial Corferias, de Bogotá.

No se puede perder toda la programación de la Feria Internacional del libro, consúltela en: www.feriadellibro.com -www.twitter.com/FilBogota - www.facebook.com/FilBogota


Hechos de paz: un nuevo camino para contar la historia

Andrés Arias, escritor y periodista, lidera los talleres Hechos de paz: cronologías para construir, dirigidos principalmente a profesores, en los que se busca proponer una nueva perspectiva de contar la historia de Colombia, ya no desde la guerra, sino a través de los hechos de paz que han marcado al país.


Andrés Arias. Crédito: Nicolás Cadena

Un hecho de paz no solo es la entrega de armas por parte de guerrilleros, son también las acciones cotidianas que privilegian la tolerancia en medio de la diferencia, la construcción de una armonía que, desde lo particular, logre trascender a lo general. El perdón y la reconciliación no se negocian en La Habana; los cimientos de la paz se edifican entre los mismos colombianos.
Con la elaboración de líneas de tiempo, hechos y lugares concretos, se le da voz a los diferentes actores, pues los talleres también están dirigidos a los niños que manifiestan su participación con hechos de paz desde las aulas de clase o sus barrios.

Los talleres invitan a la reflexión por parte de los maestros, para que reflexionen acerca de la construcción de un país en paz, a través de la educación de generaciones que crean fielmente en el cambio y en la restauración del país en el posconflicto.

Marina Colasanti: vida, obra y reflexiones de una aventurera.

Por: Estefanía Daza
En la mañana de este viernes, 29 de abril, en la Feria Internacional del Libro 2016, un grupo de estudiantes participaron de un conversatorio con la autora italiana, Marina Colasanti.

Marina Colasanti. Crédito: cuatrogatos.org

El público tuvo la oportunidad de preguntarle a Colasanti acerca del oficio de escribir, una tarea en la cual la autora se destaca, gracias a sus cuentos fantásticos para niños y su poesía para jóvenes y adultos.
En el conversatorio, la italiana compartió sus vivencias de infancia, hechos que han servido de referencia a su inspiración a la hora de escribir. Haber nacido bajo la sombra de la Segunda Guerra Mundial, llegar a las tierras suramericanas a causa de la inmigración por la guerra, y la lectura incesante durante su infancia, fueron hechos que forjaron el carácter literario de esta escritora italo-brasileña, una invitada ilustre en la FILBo 2016.
Acerca de su oficio como escritora, Colasanti sostuvo que le encantaban los riesgos “porque es cuando uno se apodera de sus posibilidades personales”. Está premisa frente a la vida, la lleva a superar sus miedos en el momento de escribir, y la ha convertido en una escritora más fuerte y con algo para contar.  
La autora cuestionó la forma de leer de los jóvenes en la sociedad moderna, manifestando que esta sociedad se mueve bajo el discurso del éxito. “No es literatura, es el éxito lo que se lee” afirmó Colasanti, después de llegar a la reflexión de que la manera en cómo se llega al éxito se ha convertido en un valor comercial.

Mirar la violencia a los ojos

El Centro Nacional de Memoria Histórica, en el pabellón 19 de la Feria Internacional del Libro, tiene un espacio destinado a los visitantes interesados en conocer los relatos de las víctimas del conflicto. Mediante exposiciones fotográficas y videos realizados por reconocidos actores colombianos, la entidad busca visibilizar los testimonios.

Crédito: Alirio Guiza

Estefanía Guzmán - Diana Pérez

“No más violencia” es una campaña en la cual la Asociación Colombiana de Actores y el Centro Nacional de Memoria Histórica se unieron con el fin de relatar los testimonios reales de las víctimas de la violencia y sus diversas manifestaciones: violencia sexual, desplazamientos forzados o comunidades a las que se les vulneraron sus derechos. Son diferentes contextos en los que, consensuadamente, cincuenta actores se disponen a contribuir a la construcción de la paz en el país para que nunca se vuelvan a repetir estos episodios en la sociedad.

 ‘Volver la mirada’ es una exposición fotográfica que explica el uso de menores en la guerra; la muestra pertenece al Centro Nacional de Memoria Histórica y está dividida en cinco ejes. El primer eje explica el porqué de los niños y las niñas en la guerra, cuáles son los elementos o causas que hacen que los niños se vean involucrados en contextos de violencia. El segundo se refiere a cuáles son las actividades en las que los menores se ven involucrados en los contextos de violencia. El tercero es sobre las consecuencias de la guerra, desde emocionales, psicosociales y afectaciones físicas. El eje cuarto y quinto tratan de cambiar la mirada, no limitarse solamente a la victimización y también reconocer que las víctimas tienen recursos para rehacer sus historias de vida, proyectarse hacia el futuro.


La finalidad de esta exposición es que los visitantes interactúen con las fotografías y videos. El espacio está dispuesto como un aula de clase y pretende que las personas tengan la posibilidad de dejar sus mensajes y opiniones, tanto en las paredes dispuestas como tableros escolares como en los cuadernillos que contienen testimonios de niños y niñas que han estado en circunstancias difíciles relacionadas con la guerra. Mediante frases como “estos no son juguetes” los visitantes expresan su desacuerdo con la participación de los niños en la guerra. Ésta deja a su paso daños irreparables, no solo en adultos, sino en los niños y niñas, que van desde perspectivas psicosociales hasta afectaciones físicas.

Viajar con la palabra

Por Elizabeth Martínez Arza.



Miles de personas viajan a diario. Ahora bien, entre descubrir tradiciones y culturas diferentes, y llevarse recuerdos del paisaje visitado, existe una sola cosa en común: Un relato. Para un escritor, un viaje es un concepto un poco más amplio, gracias a su habilidad para convertir una experiencia en arte.

Joäo de Melo y Sergio Chejfec, moderados por Juan Álvarez, tocaron este tema en el conversatorio “El arte de viajar”, evento que hizo parte del ciclo “Leer los viajes” de la Feria Internacional del Libro 2016. Cada uno brindó sus percepciones acerca de los viajes que ha hecho, de sus viajes “literarios” favoritos y de cómo la literatura puede ser una herramienta para conocer otros lugares, rompiendo la barrera del espacio.

“Las palabras viajan con nosotros y nosotros viajamos con ellas” mencionó Joäo.

Los escritores reflexionaron sobre el hecho de que, actualmente, las personas que tienen la capacidad de viajar sólo lo hacen por dos razones: necesidad impuesta o conveniencia económica. Mencionaron la necesidad que tienen varias personas de huir de sus países en calidad de exilio o problemas políticos, lo que les impide disfrutar de sus viajes.


“La literatura ha hecho de mi un viajero” reflexionó Joäo y narró que ha conocido gran parte de América Latina por las narraciones de otros autores como Gabriel García Márquez y Héctor Abad Faciolince. 

viernes, 29 de abril de 2016

Diana Uribe reflexiona sobre la historia y la paz

Crédito: Chris Mosquera


En un auditorio lleno, y con el habitual tono con el que cada domingo ilustra sobre las historias del mundo a sus oyentes a través de la radio, Diana Uribe dio inicio a un diálogo en el que evocó los procesos de paz que dieron fin a los más crudos conflictos de los últimos tiempos. Los personajes del relato que compartió anoche, en el auditorio José Asunción Silva de Corferias, eran hombres y mujeres con crímenes a cuestas; naciones enfrascadas en divisiones sangrientas que parecían no tener fin y líderes que, contra todo pronóstico, rompieron con la oscura tradición del odio y cambiaron el rumbo de sus pueblos.

Las primeras reflexiones de Uribe se dieron a partir de la reciente visita de Svetlana Alexiévich, Premio Nobel de Literatura, a la FILBo. Gracias a la obra de la Nobel, la historiadora tuvo la oportunidad de pensar el conflicto colombiano desde una nueva perspectiva. Sobre la cultura de la guerra que impera en ambos países, Diana afirmó: “Por un lado, tenemos una fatalidad colectiva, una idea de que nosotros no podemos hacer grandes transformaciones, de que nos falta “cinco pa’l peso”. A nivel individual todo el mundo la tiene: la tiene, le va a salir y está en la jugada, pero a nivel colectivo, siempre creemos que no somos capaces de transformarnos.

Yo le he echado cabeza y me imagino que eso viene más o menos desde la separación de Panamá y la guerra de los mil días, que dejó un imaginario devastador: una sensación de mutilación que se nos quedó: como que no podemos manejar las cosas… Hay pueblos que tienen una idea de que a uno nunca le va a tocar la chévere, la pavimentada. Los bielorrusos tienen una idea muy dura de la vida también”.

A partir de esas ideas en común nació toda una conferencia que abordó los procesos de paz en Irlanda, Sudáfrica y Ruanda, entre otros, así como el resurgimiento de la democracia de Chile. Todos fueron, en su momento, conflictos marcados por la barbarie, el odio y la sed de venganza. Todos tuvieron la limitante de que sus pueblos no imaginaban una solución para el conflicto y sentían que no tenían el destino en sus manos. Pero de algún modo y gracias a líderes como Nelson Mandela, todos lograron reconstruirse, fortalecer su identidad y surgir como proyectos nacionales dentro del mundo actual.

La de Uribe fue una charla que desembocó en la necesidad de retomar como ciudadanos las riendas de la nación, en un momento en el que Colombia se juega una oportunidad para superar sus conflictos armados y encontrar un lugar en la historia del mundo.


“Lo importante no es el libro: lo importante es el texto”

¿Cuál es el futuro del libro? O más bien, ¿el libro tiene futuro? En su charla Eppo van Nispen plantea qué sucederá en este mundo cambiante con predominio de la tecnología.

Crédito: @eppovannispen

Eppo van Nispen no le teme a hablar en español. Este holandés, a quien en 2010 el gobierno de Holanda comisionó para trabajar y enfocarse en el futuro de los medios y el mundo digital junto con universidades y colegios, está convencido de la importancia del texto como herramienta para cambiar el mundo.

En el evento El futuro del libro, que se presentó en el auditorio del Pabellón de Holanda, Van Nispen sorprendió a los asistentes con una charla amena y divertida en la que este fanático de la tecnología mezcló imágenes y videos de diferentes cosas: “Es la primera vez que vengo a Colombia. Estoy muy feliz de estar acá,” dijo al inicio de su presentación, en un español a medias. “Mi español es de la escuela del bar,” comentó y logró sacar la primera sonrisa en los asistentes.

Eppo comenzó su vida profesional como periodista de radio, en donde tuvo que hacerse cargo de formatos digitales interactivos. Esto le generó un interés grande por los medios y el futuro, que lo llevó a enfocar sus conocimientos hacia desarrollos digitales y medios, y la interacción de estos con las personas, en especial el futuro de la información, especialmente en librerías y colegios.

“Cuando hablamos del futuro del libro, hablamos del futuro de nosotros”. A partir de la pregunta, ya recurrente desde hace varios años, sobre si los libros van a desaparecer, Eppo es tajante en afirmar que “el libro es solo un contenedor. Lo importante es el texto”. Él es consciente de la forma como ha cambiado el mundo gracias a las nuevas tecnologías. Esto ha llevado a que “la vida ha cambiado con la información”, y usó un ejemplo ilustrado con una imagen en donde muestra cómo, en solo quince segundos a través de Twitter, todo el mundo ya conocía imágenes del tsunami de Tohoku, en Japón, en 2011. La imagen muestra cómo la gente trinó desde Japón y cómo al compartir estos trinos, el mundo entero conoció la tragedia.

Pero la entrada del mundo digital en la literatura no ha sido fácil y, aunque sea difícil de creer, Van Nispen mostró que los libros electrónicos en el mundo entero son solo el 1% del total. Esto quiere decir que, todavía, el libro impreso sigue siendo una herramienta muy usada, aunque la estadística dice que tan solo se lee el 26% de los libros impresos. Es decir que las nuevas tecnologías y los nuevos medios han ido desplazando de manera contundente a la lectura. “No sé qué hubiera pasado si yo hubiese nacido en esta época. Cuando yo era niño, en mi casa había un televisor y solo dos canales. Por la noche, antes de dormir, yo leía. Los libros eran mis compañeros de aventuras. Pero creo que si yo hubiera nacido en esta época, muy probablemente mi entretenimiento a la hora de acostarme sería un celular de última generación, con juegos y aplicaciones”.

Pero lo que más le importa a este hombre, quien con su discurso directo y energía supo ganarse al auditorio, es el futuro de la palabra. “Muchos dicen: una imagen vale más que mil palabras. Y muy probablemente hoy en día, con todas las aplicaciones que hay, sea cierto. Una foto, un video o un vine sirven para comunicar de manera rápida y directa hechos que antes requerían de la reflexión en una carta”.

Pero a la gente se le olvida que “una sola palabra puede evocar… innumerables imágenes”, agrega. Y recuerda que en este época virtual es, quizás, cuando más se escribe.


Por Nicolás Dávila

“Con los niños hay que tratar de hablar al mismo nivel”

La holandesa Marije Tolman está en Colombia para lanzar el libro ‘¡Chau!’, ilustrado por ella.

Crédito: http://marijetolman.nl/

Marije Tolman habla a través de la experiencia: lleva diez años ilustrando libros para niños. La razón por la que se dedicó a ilustrar libros es clara:

“Desde que estaba en la universidad estudiando diseño, siempre buscaba dar soluciones ilustradas a los problemas. Un semestre me fui de intercambio a Escocia y conocí el mundo de la ilustración. Hablé con la universidad y me quedé seis meses estudiando allá. Cuando volví, terminé mi carrera de diseño y alcancé a trabajar casi tres años interrumpidos en ella. Todos me decían que yo debía dedicarme a ilustrar. Y bueno, ya llevo diez años en esto. Son entre treinta y cuarenta libros los que ya he publicado”.

Para Marije, la ilustración es un mundo que le permite buscar entablar una conversación con los niños. “A los adultos se nos olvida escuchar. Y a la hora de hablar, el adulto piensa mucho. Tiene claro que lo que diga puede ser interpretado y usado de cualquier manera. El niño, en cambio, es más espontáneo: puede hablar, pensar y sentir en un nivel más puro. Es por eso que, para hablar con un niño, hay que tratar de hablar al mismo nivel de él”.

En cuanto al proceso que sigue para ilustrar cada libro, Marije es clara en decir que, si bien al principio estaba amarrada al proceso habitual de seguir storybards y bosquejos, ahora es mucho más libre para dibujar:

“Logro acercarme al nivel de los niños gracias a que, a la hora de ilustrar, no pienso en nada. Me siento y pongo la música a un volumen alto, trato de olvidarme de mí misma e imagino la que sería la última ilustración para cada texto. Así voy avanzando hasta llegar al final. Uno nunca sabe cómo va a terminar un libro. Debo dejar claro que el texto es algo diferente. Yo lo leo completo. Pero trato de dejarme ir a la hora de ilustrar una historia”.

Cada libro requiere de un tipo particular de música. Por ejemplo, para ilustrar ¡Chau!, Marije deja claro que: utilizó “música de Bach y de Schubert, además de David Bowie. Cuando quería tener una atmósfera de vuelo fluido, escuchaba Bach. Y cuando buscaba escenas vívidas agudas, ponía Rebel Rebel, De David Bowie.”

¡Chau! es la historia de los sueños de dos hermanos: Marta y Bor. Ella sueña y cuenta sus sueños a la hora del desayuno. Sueña, gracias a la compañía de sus peluches. Pero Bor no sueña nada… o eso dice… Gracias a la intervención de Marta, Bor logra descubrir el mundo de los sueños.


La posibilidad de acompañar el texto con imágenes sencillas y llenas de colores hacen de este libro una lectura apropiada para leer a la hora de dormir. O, más bien, una lectura apropiada para recordar que, para soñar, solo necesitamos la compañía adecuada, y la posibilidad de dejarnos llevar por nuestra imaginación.

Mi padre y otros accidentes


La periodista Paola Guevara presenta hoy 29 de abril en FILBo su debut literario: Mi padre y otros accidentes, una novela autobiográfica que habla de búsquedas, dudas y certezas, y de la relación de una hija con su padre tanto en la figura simbólica como en su presencia real.

Crédito: @PGPaolaGuevara

“Porque yo supe de Fernando Lince por un mensaje de texto. Él supo de mí por un mensaje de mi madre en su Facebook. No sé si soy la hija de ese hombre pero, no me cabe la menor duda, soy hija de la maldita era digital”.
Una periodista de 30 años de edad, casada y madre de un niño pequeño, se muda a una nueva ciudad por trabajo y, al cabo de cuatro años, recibe un mensaje de texto donde su madre le informa el nombre de su “verdadero padre” quien, para sorpresa suya, vive a seis calles de su casa. No es un padre convencional el que aparece, sino un piloto experimentado, único sobreviviente de un accidente de avión, quien ha tenido tiempo de sobra para repasar sus errores del pasado y que recibe de la mano de esta hipotética hija una nueva oportunidad para hacer lo correcto.
A partir de este encuentro con lo inesperado se desatan recuerdos, dudas, rencores, dolores antiguos, pero también profundas transformaciones psíquicas que harán necesario reescribir el pasado. Un relato honesto a más no poder, cruel por momentos, pero a la vez dotado de una gran belleza narrativa. Es una novela de no ficción, pero a la vez un inventario de segundas oportunidades y una reflexión sobre el sentido último de la familia.
"Con una narración que revisa la realidad con lupa y explora los sentimientos con aguda necesidad, Guevara demuestra que la realidad es más potente que la ficción". Revista Arcadia.
"Que la realidad supera la ficción es una máxima que Gabriel García Márquez sacó del lugar común, porque demostró que la esencia de su obra de ficción estaba construida a partir de hechos comprobables llevados al mundo hiperbólico del realismo mágico. Esa verdad narrativa recobra vigencia en ‘Mi padre y otros accidentes’, una novela editada por Planeta" El Espectador.
“Tremenda novela de Paola Guevara; se lee de un tirón, hace llorar, hace reír. Es un sube y baja de emociones increíble y con la voz de una persona que sabe contar una historia”, Fernando Gómez Echeverri, Revista Bocas.
Paola Guevara (Cali, 1977). Es periodista de la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá. Ha publicado su trabajo en las revistas Cambio, Cambio México, Carrusel, DonJuan, Cromos, Shock, Star, entre otras; trabajó en creación de revistas de lujo como editora general del Grupo 10+ y, tras su paso por la Casa Editorial El Tiempo, desde 2007 se desempeña como editora de cultura, entretenimiento y tendencias del diario El País, de Cali, donde también es columnista de las páginas de Opinión.

Presentación del libro: Mi padre y otros accidentes de Paola Guevara. La escritora conversará con el cronista y periodista Alberto Salcedo Ramos. Viernes 29 de abril, Salón Literario Ecopetrol 7. Hora, 7:00 p.m. 

Visor a la poesía

La editorial Visor presentó en FILBo sus novedades: ‘Antología poética’, de Wislawa Szymborska (Premio Nobel de Literatura 1996); ‘Bálticos y otros poemas’, de Tomas Tranströmer (Premio Nobel de Literatura 2011); ‘Ruiseñor, deséame suerte’, de Charles Bukowski, y ‘Los ojos de Elsa’, de Louis Aragón.


Para los amantes de la poesía, Visor significa, con sus carátulas negras y títulos en blanco, el mejor camino para internarse en el universo de los más grandes poetas de todos los tiempos. “Con más de 45 años de experiencia, Visor Libros es, sin duda, el sello más importante de poesía en lengua española”, explica el poeta Federico Díaz-Granados, editor de Visor Libros Colombia.
En su amplio catálogo, con más de 850 títulos publicados, aparecen vates españoles, latinoamericanos y de otras lenguas, desde Walt Whitman a Rimbaud. En 2015, Visor Libros abrió “su primera filial en América con el objetivo de hacer accesible su fondo editorial al lector colombiano”, señala Díaz-Granados.
El viernes 29 de abril, Visor Libros lanza en FILBo cuatro novedades: Antología poética, de Wislawa Szymborska (Premio Nobel de Literatura 1996); Bálticos y otros poemas, de Tomas Tranströmer (Premio Nobel de Literatura 2011); Ruiseñor, deséame suerte, de Charles Bukowski, y Los ojos de Elsa de Louis Aragón. Sobre estas obras comenta el editor de Visor Libros Colombia: Antología poética de Wislawa Szymborska, es “la antología más completa de la Premio Nobel, la gran dama de la poesía europea”; Bálticos y otros poemas de Tomas Tranströmer, una “traducción de Francisco Uriz, uno de los mejores conocedores de la poesía nórdica”; Los ojos de Elsa de Louis Aragón, viene “en traducción de la poeta española Raquel Lanseros, muy conocida en Colombia”. Este lanzamiento, que contará con la participación de los poetas Luis García Montero (España), Ramón Cote Baraibar y Federico Díaz-Granados (Colombia) y el editor Jesús García Sánchez (Chus Visor), se complementa con el volumen  Ruiseñor, deséame suerte, de Charles Bukowski.  


Fin y principio (1993)
Después de cada guerra
alguien tiene que limpiar.
No se van a ordenar solas las cosas,
digo yo.
Alguien debe echar los escombros
a la cuneta
para que puedan pasar
los carros llenos de cadáveres.
Alguien debe meterse
entre el barro, las cenizas,
los muelles de los sofás,
las astillas de cristal
y los trapos sangrientos.
Alguien tiene que arrastrar una viga
para apuntalar un muro,
alguien poner un vidrio en la ventana
y la puerta en sus goznes.
Eso de fotogénico tiene poco
y requiere años.
Todas las cámaras se han ido ya
a otra guerra.
A reconstruir puentes
y estaciones de nuevo.
Las mangas quedarán hechas jirones
de tanto arremangarse.
Alguien con la escoba en las manos
recordará todavía cómo fue.
Alguien escuchará
asintiendo con la cabeza en su sitio.
Pero a su alrededor
empezará a haber algunos
a quienes les aburra.
Todavía habrá quien a veces
encuentre entre hierbajos
argumentos mordidos por la herrumbre,
y los lleve al montón de la basura.
Aquellos que sabían
de qué iba aquí la cosa
tendrán que dejar su lugar
a los que saben poco.
Y menos que poco.
E incluso prácticamente nada.
En la hierba que cubra
causas y consecuencias
seguro que habrá alguien tumbado,
con una espiga entre los dientes,
mirando las nubes.

Presentación Visor Libros Colombia. Antología poética de Wislawa Szymborska; Ruiseñor, deséame suerte de Charles Bukowski; Bálticos y otros poemas de Tomas Tranströmer; Los ojos de Elsa de Louis Aragon. Viernes 29 de abril, Sala Múltiple No 2 de FILBO / Corferias, Hora: 5:00 p.m.

La era de la dictadura del lector

Por: Vanessa Juliao

La llegada del internet revolucionó múltiples sectores, incluyendo al editorial. Muchos son los escritores y editores que se han visto forzados a migrar al formato digital. Desinformados, sin experiencia y aferrados a la idea que el papel será irremplazable, algunos actores del mundo de las letras, aún tratan de adaptarse al cambio.




Por esta razón, la Cámara Colombiana del Libro, abrió un espacio dentro de la FILBo para resolver estas y otras dudas. Los ‘Foros del libro’, fueron destinados a actualizar a las editoriales sobre las oportunidades que ofrece la industria hoy en día.  

Hacer una aproximación para saber cómo los editores están vendiendo los nuevos modelos de negocio, es una de las principales preocupaciones de esta serie de eventos. En una conversación entre el mexicano Manuel Dávila, gerente global de negocios de Bajalibros, la tienda de eBooks más grande de Latinoamérica, Catalina Holguín, directora editorial de Manuvo Colombia y Jaime Hurtado, CEO de Hipertexto, se habló de cuáles son las estrategias de las editoriales en temas digitales.

Según el conversatorio, los escritores y editores deben tener claro que el mejor formato para promocionar sus publicaciones es el que pueden pagar y que a la vez vaya encaminado al público al que desean llegar: en muchas ocasiones, editores y escritores invierten millones de pesos, esperando un impacto inconmensurable pero lamentablemente se aferran a una estrategia incorrecta, que no genera la respuesta deseada al momento de comercializar sus productos.

En Latinoamérica, las condiciones están dadas para que crezca el consumo de libros electrónicos pagos. Solo en Argentina hay cerca de 33.000 dispositivos para lectura electrónica. “La industria está hoy vigorosa, está fuerte, está incomoda, está teniendo discusiones que no se tenían hace mucho tiempo. Hay un pánico terrible por declarar un ganador, el libro físico contra el libro electrónico, y esta discusión termina siendo el lastre que no permita que el barco se mueva”, así fue como Dávila describió dentro de la discusión la situación de las empresas literarias.

“Hay un nivel de sensibilización en el que hemos estado solos, en el que creo que no hemos sido considerados como parte del sector del libro, por buena parte de esos recelos”, el desconocimiento y los prejuicios de no entender las posibilidades que ofrece el libro digital hace que el interés disminuya. Lo ideal es abarcar todos los canales posibles para encontrar el formato ideal, para saber cómo llegar a otras personas y otros públicos. ¿Cómo llegar a esos lugares donde no llegan las librerías pero sí el internet?, se trata fundamentalmente de entender las plataformas para explorarlas en mayores proporciones.

Actualmente estamos en lo que Manuel Dávila llama ‘La dictadura de lector’, resulta imposible considerar la industria sin tener en cuenta lo que las personas están leyendo, porque son ellos los que deciden. “Nosotros ya no importamos más, los señores que editan libros no importan más, somos una especie no en peligro de extinción sino en proceso de suicido. El lector está determinando los caminos”.


El evento concluyó con la premisa de que el principal problema es que la industria está ignorando a toda la población lectora e ignora la forma en que sus canales de venta actúan, por eso la tarea es salir a mirar cómo funciona el mercado y que está pasando afuera, es ahí donde las editoriales digitales independientes se convierten en la principal ayuda para los que quieren explorar la venta de sus publicaciones. 

Incentivando en los niños amor por la lectura

Nacida en la ciudad de Cartagena, y radicada hace 21 años en Ámsterdam, Holanda, llegó a la Feria Internacional del Libro en Bogotá (FILBo) la escritora e ilustradora de libros infantiles Ángela Peláez, quien se presentó para contar su recorrido por el Reino de los Países Bajos, y compartir algunos de sus más representativos libros.



Ángela descubrió la pasión por el arte de la ilustración y la escritura a través de sus hijos y su labor de madre, estos dos aspectos han sido su fuente de inspiración para la creación de libros como: El pequeño oso polar encuentra un amigo, Los sueños del gato Milu,  El señor Finney y el mundo patas arriba, Sofía y el león  y El nido de Mía, siendo estos dos últimos los que ella escogió  para su sesión de -Lectura infantil & juvenil-  que tuvo lugar en el Pabellón de Holanda en esta vigésima novena edición de la FILBo.
En un momento de la charla, Ángela reconoció que su fuerte no era la escritura, sino la ilustración; sin embargo, se vio motivada a escribir sus propios textos un día que llegó a la semifinal en un concurso de cuento en el cual participó. Del mismo modo, aceptó que escribir un libro es muy complicado, pero aseguró que más difícil aún es poder publicarlo. A pesar de esto, Peláez logró con el tiempo, encontrar un balance entre texto e ilustración, e hizo que su trabajo en Holanda fuera muy bien recibido. “Para ellos fue interesante que una colombiana escribiera cuentos para niños, esto se dio gracias a su mezcla de culturas y a lo abiertos que son a pensamientos de otros lugares”, agregó Ángela, sobre su experiencia en este país, en donde ha publicado seis libros.

A través de sus cuentos, Ángela quiere conquistar el corazón de los niños, creando historias donde predominen valores como la perseverancia, el respeto y la bondad, incentivando en ellos la imaginación, la creatividad y amor por la lectura. A su vez, busca rescatar la lectura en familia: una tradición que se ha perdido en la batalla contra las nuevas tecnologías. “Es importante establecer espacios donde los padres lean para sus hijos, así lograrán mantener en ellos la curiosidad viva, haciéndolos soñar, mientras reflexionan sobre su entorno y todo lo en él perciben”, añadió Ángela para finalizar su intervención.